La mirada puede perder luminosidad y juventud debido a la formación de ojeras. Esta alteración de la tonalidad de la piel puede tener origen en diversos factores como la dilatación de los vasos sanguíneos, predisposición genética, edad o cambios hormonales. Por ello, en Dermoesthetik hemos recopilado los mejores tratamientos para devolverle el brillo a tu mirada.
A través de ácido hialurónico reticulado, se puede rellenar el hundimiento que suele aparecer en el contorno del ojo; cubriendo perfectamente los vasos que discurren por esa zona y matizando la oscuridad que puede aparecer en aquellos pacientes con una piel extremadamente fina.
A través de mesoterapia, se colocan inyecciones intradérmicas que permiten recuperar el colágeno y la elastina, indispensables para la regeneración de nuevos tejidos. De esta forma, se mejora la calidad de la piel y la luminosidad de esa área.